Monterrey aprovechó su gran arranque para abrir el marcador en su propio estadio con un remate de zurda a puerta abierta de Rogelio Funes Mori, luego de la tremenda falla de Sebastián Cáceres.
CIUDAD DE MEXICO (apro).- En una dramática definición, Rayados de Monterrey superó por la mínima diferencia 1-0 al América para consagrarse monarca de la Liga de Campeones de Concacaf 2021 – su quinto título- y asistirá al Mundial de Clubes a disputarse el próximo año en los Emiratos Árabes.
Monterrey aprovechó su gran arranque para abrir el marcador en su propio estadio con un remate de zurda a puerta abierta de Rogelio Funes Mori, luego de la tremenda falla de Sebastián Cáceres.
El defensa paraguayo terminó por rebanar el esférico frente al arco de Guillermo Ochoa en un intento de despeje que Funes Mori no perdonó tras la gran jugada de Jesús Gallardo por la banda izquierda los 9 minutos, en ajustada acción validada por el VAR.
Un minuto antes, Guillermo Ochoa le arrebató el gol a Funes Mori en un gran lance, mientras Carlos Rodríguez, de notable actuación, envió su remate de cabeza por encima del arco.
América asumió cierto control del juego a partir de la media hora, pero hizo poco en el primer tiempo: apenas un tiro libre directo de Richard Sánchez que el portero Esteban Andrada mandó a saque de esquina.
Luego, una gran jugada individual del español Álvaro Fidalgo terminó con un remate de Henry Martin que fue rechazado por Andrada.
El equipo visitante dominó el juego por algunos lapsos, pero careció de poder ofensivo.
A los 80 minutos, Cáceres se redimió al salvar la meta americanista en la línea después del remate del holandés Vincent Janssen que amenazaba con cruzar la portería.
En la última jugada, en tiempo de reposición (90+10’), América estuvo a nada de igualar el marcador, primero con un remate que Federico Viñas impactó en el travesaño, y luego, tras el rebote el balón le pegó en la mano a Maxi Meza. Luego, ante los reclamos generalizados de los jugadores de ambos equipos, y con una revisión en el VAR del árbitro Fernando Hernández se escribió el dramático desenlace.
Fuente: PROCESO.