A 13 meses de que se detectara el primer caso de COVID-19, en la ciudad de Wuhan, epicentro de la pandemia, poco a poco la población retoma sus actividades, al grado de que actualmente se vive con normalidad, incluso con fiestas masivas, centros nocturnos abiertos y eventos como bodas sin problemas, manteniendo las medidas de seguridad.
“Durante la epidemia, fue la primera vez que me quedé con mi familia durante tanto tiempo.
En ese momento, porque era posible ver la muerte en cualquier lado, lo más profundo que sentí durante la epidemia fue el amor en la familia”, dijo Shu Lingyun, estudiante china residente de Wuhan.
En Wuhan el problema fue tan grave en el inicio de la emergencia sanitaria, que se construyó un hospital en tan solo 14 días para combatir el virus, el cual de acuerdo a datos de la Universidad Johns Hopkins ha contagiado a más de 95 mil personas en China.
En esta localidad viven más de 10 millones de personas, siendo la octava ciudad más poblada del país asiático, donde se ha reportado la muerte de más de 4 mil 700 personas.